sábado, 14 de mayo de 2011

.....Terroristas...

Según las conclusiones de las investigaciones oficiales del gobierno estadounidenses, los ataques cumplían con la intención declarada de al-Qaeda
Dicha fatwa lista tres "crímenes y pecados" cometidos por los estadounidenses:
  • Apoyo militar de EE.UU. a Israel.
  • Ocupación militar de la península arábiga por EE.UU.
  • Agresión estadounidense contra el pueblo de Irak.
La fatwa establece que Estados Unidos:
  • Saquea los recursos de la Península arábiga.
  • Dicta la política a seguir a los gobernantes de dichos países.
  • Apoya a regímenes y monarquías abusivos que oprimen a su propia gente.
  • Tiene bases e instalaciones militares en la península arábiga, violando así su Tierra Santa, con el fin de atemorizar a los estados vecinos.
  • Intenta dividir a los estados árabes con la finalidad de debilitarlos como fuerza política.
  • Apoya a Israel, y desea distraer a la opinión mundial de la ocupación de los Territorios Palestinos.
La Primera Guerra del Golfo, el posterior embargo sobre Irak, y el bombardeo de este país por Estados Unidos son citadas en la fatwa de 1998. Para desaprobación de musulmanes moderados,se cita textos islámicos como exhortación de la acción violenta de militares estadounidenses hasta que los agravios alegados se solucionen: estableciendo que "los ulemas a lo largo de la historia han estado de acuerdo en que la Yihad es un deber individual si los enemigos destruyen los países musulmanes."
Guerra del Líbano de 1982, responsable  los Estados Unidos, le impulsó a desarrollar los atentados. En el vídeo, bin Laden también afirma que con ellos quería "restaurar la libertad de nuestra nación," para "castigar al agresor".
"Juramos que los estadounidenses no vivirán seguros hasta que vivamos en Palestina. Esto ha mostrado la realidad de los Estados Unidos, que pone los intereses de Israel por encima de los de su propia gente. Estados Unidos no obtendrá nada de esta crisis hasta que abandone la Península Arábiga y cese en su apoyo a Israel.

Los atentados del 11 de septiembre de 2001 , fueron una serie de atentados terroristas suicidas cometidos aquel día en los Estados Unidos por miembros de la red yihadista Al Qaeda mediante el secuestro de aviones de línea para ser impactados contra varios objetivos y que causaron la muerte a cerca de 3000 personas y heridas a otras 6000, así como la destrucción del entorno del World Trade Center en Nueva York y graves daños en el Pentágono en el Estado de Virginia, siendo el episodio que precedería a la guerra de Afganistán.
Los atentados fueron cometidos por diecinueve miembros de la red yihadista Al-Qaida, divididos en cuatro grupos de secuestradores, cada uno de ellos con un terrorista piloto que se encargaría de pilotar el avión una vez ya reducida la tripulación de la cabina. Los aviones de los vuelos 11 de American Airlines y 175 de United Airlines fueron los primeros en ser secuestrados siendo ambos estrellados contra las dos torres gemelas del World Trade Center, el primero contra la torre Norte, el segundo poco después contra la Sur, provocando que ambos rascacielos se derrumbaran en las dos horas siguientes.


El tercer avión secuestrado pertenecía al vuelo 77 de American Airlines y fue empleado para ser impactado contra una de las fachadas del Pentágono, en Virginia. El cuarto avión, perteneciente al vuelo 93 de United Airlines, no alcanzó ningún objetivo al resultar estrellado en campo abierto, cerca de Shanksville, en Pensilvania, tras perder el control en cabina como consecuencia del enfrentamiento entre los pasajeros y tripulantes con el comando terrorista.

Los atentados causaron más de 6.000 heridos, la muerte de 2.973 personas y la desaparición de otras 24, resultando muertos igualmente los 19 terroristas.
Los atentados, que fueron condenados inmediatamente como horrendos ataques terroristas,por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, se caracterizaron por el empleo de aviones comerciales como armamento, provocando una reacción de temor generalizado en todo el mundo y particularmente en los países occidentales, que alteró desde entonces las políticas internacionales de seguridad aérea.




La principal justificación para esta operación que ofrecieron el Presidente de los Estados Unidos, George W. Bush y sus aliados en la coalición, fue la falsa afirmación de que Irak poseía y estaba desarrollando armas de destrucción masiva (ADM), violando un convenio de 1991. Funcionarios de los Estados Unidos sostuvieron, de un modo interesado y tendencioso, que Irak representaba una inminente, urgente e inmediata amenaza a los Estados Unidos, a su pueblo y a sus aliados, así como a sus intereses. Se criticó ampliamente a los servicios de información, y los inspectores designados al efecto no encontraron pruebas de existieran las pretendidas armas de destrucción masiva. Después de la invasión, el Grupo de Investigación en Irak llegó a la conclusión de que Iraq había terminado sus programas para desarrollar dichas armas, en 1991 y no había ninguna en el momento de la invasión, pero que tenían la intención (?) de reanudar la producción siempre y cuando se levantaran las sanciones. Algunos funcionarios de los Estados Unidos alegaron que Saddam Husein y Al Qaeda habían estado cooperando, pero no hay pruebas de que exista una relación de colaboración. Otras razones para la invasión por parte de los funcionarios incluían las preocupaciones sobre el apoyo financiero de Irak para las familias de terroristas suicidas palestinos,¿violaciones de los derechos humanos por parte del gobierno iraquí?, propagación de la democracia,las reservas de petróleo de Iraq, aunque este último ha sido negado por otros funcionarios.

La invasión llevó a la rápida derrota de las fuerzas iraquíes, el derrocamiento del Presidente Sadam Husein, su captura en diciembre de 2003 y su ejecución en diciembre de 2006. La coalición dirigida por los Estados Unidos en el Irak ocupado trató de establecer un nuevo gobierno democrático. Sin embargo, poco después de la invasión inicial, la violencia contra las fuerzas de la coalición y entre los diversos grupos étnicos dio lugar a una guerra asimétrica con la insurgencia iraquí, la guerra civil entre sunitas y chiitas iraquíes, y las operaciones de Al-Qaeda en Iraq.

Las estimaciones del número de personas muertas fluctúan entre más de 150.000 a más de 1 millón de personas, según fuentes. El costo financiero de la guerra ha sido estimado en más de £ 4.500 millones ($ 9.000 millones) para el Reino Unido, y más de $ 845.000 millones a los Estados Unidos, con el coste total para la economía de este último estimada en $ 3 a 5 billones. Algunas de las naciones que integraron la coalición comenzaron a retirar sus fuerzas como consecuencia de una opinión pública desfavorable y al progresivo aumento de efectivos iraquíes para asumir la responsabilidad de la seguridad.